sábado, 4 de junio de 2011

NO A KEIKO






Tenemos que tomar una decisión que definirá nuestro juicio político por los siguientes cinco años. Elegir o dejar que se elija a un candidato que representa uno de los episodios más nefastos para el Perú en los últimos años, nos hace cómplices de la degradación política, ética y moral de un país. Muchos estarán en contra del otro candidato, pero su elección no representa absolutamente nada a nivel moral, es sólo un riesgo. Si tengo que elegir entre alguien en quién sospecho o a alguien que me ha robado, humillado y asesinado a miembros de mi familia, obviamente elegiré al primero. Y ahí paro de contar, no me interesa si la economía crecerá, si la bolsa caerá, o si tendré más dinero en estos cinco años. Si no hay decencia, lo demás no interesa, lo económico ni lo social es relevante por ahora, solo lo moral, ya que al final esto es lo que guiará las acciones de los ciudadanos con respecto a los otros asuntos.

Elegir a un Fujimori es dejar que la mafia que violó todos los derechos constitucionales que nos enseñaron a respetar en las escuelas y las universidades, quede impune; si permitimos eso, qué podremos exigir en los próximos años. Prefiero vivir inmerso en una economía estancada que en un país sin decencia, el dinero no es tan importante para vivir como lo es el respeto por uno mismo. No a Keiko, no a toda esa basura política que avergüenza al Perú.





Es necesario, en cualquier circunstancia, que los conflictos no lleguen a niveles dramáticos...

Es necesario, en cualquier circunstancia, que los conflictos no lleguen a niveles dramáticos. Hace unas semanas, vi un documental sobre la i...