miércoles, 27 de febrero de 2019

El Porqué de la lectura

Este dibujo me ha traído a la mente un comentario recurrente que siempre me hacían en mi adolescencia. Cada vez que me veían leyendo me preguntaban sobre la materia que estudiaba y cuándo sería el examen. Siempre pensé que algo andaba mal cuando se creía que leer era solo una obligación y no una necesidad, o mejor aún, una forma de distraerse. Eso me trae otra reflexión, que hay actividades que tienen más prestigio que otras. Si uno se pasaba la tarde leyendo una novela, eran pocos los que te reclamaban tu "pérdida de tiempo" en eso, sin embargo, cuando uno se la pasaba jugando un videojuego, los reproches eran unánimes. He considerado que ambas actividades son equivalentes si es que son usadas para la distracción.
Finalmente, leer no es necesariamente una actividad seria, puede ser tan lúdica como un partido de fulbito de fin de semana o un paseo por el parque. El mundo real es más serio, si alguien muere en un libro la vida no te cambia.


viernes, 22 de febrero de 2019

La libertad mal entendida

"La libertad no es un valor que sólo los países cultos y evolucionados aprecian en todo lo que significa. Masas desinformadas, discriminadas y explotadas pueden también, por caminos tortuosos a menudo...descubrir que la libertad no es un ente retórico desprovisto de sustancia, sino una llave maestra muy concreta para salir del horror, un instrumento para construir una sociedad donde hombres y mujeres puedan vivir sin miedo, dentro de la legalidad y con oportunidades de progreso. Ha sucedido en Asia, en América Latina, en los países que se vivieron sometidos a la férula de la Unión Soviética." MVLL

Lo que me pregunto es que si bien esas masas desinformadas, discriminadas y explotadas también pueden encontrar el valor a la libertad, ¿El precio a pagar por todo ese tiempo de represión no será el no distinguirla cuando cambie de forma y no sea simplemente sinónimo de rebelión?.

En el Perú aún hay 20% de personas que todavía no le encuentran ese valor.

Cuando encontraba algún ferviente de la palabra libertad, le daba un ejemplo de dos peleadores que se enfrentaban. Si uno de ellos era grande y fuerte y el otro no, el primero no deseaba que lo sujeten a cadenas porque reprimían la libertad de gozar de todo su poder, mientras que el otro que presentía su desastroso desenlace rogaba porque lo sujeten. Lamentablemente, la libertad es una palabra encantadora pero solo cuando has sufrido la esclavitud. La libertad sin ese sentimiento antagónico genera el libertinaje.

Si creemos que el cuerpo y el espíritu andan siameses sujetos a nuestro ser, la muerte es una atractiva manera de liberar el espíritu que se encuentra condenado a la vulnerabilidad del cuerpo humano.


lunes, 11 de febrero de 2019

La telebasura

La telebasura es como la comida rápida y las golosinas, es usar y botar, y normalmente se la ve cuando uno no quiere pensar en nada o indignarse gratuitamente. La actualidad de la televisión peruana ofende porque es más libre que los individuos mismos, repite conceptos foráneos de entretenimiento sin entender la idiosincrasia peruana, cucufata y elitista. Es así que el individuo se deleita viendo a escondidas esta televisión pero no lo acepta. Y hay que aceptar que el culpable de que estos programas tenga tanto éxito es que la gente los ve pero no lo dice. En la red todos los critican y se llenan la boca argumentando miles de razones casi fascistoides porque aducen que si a ellos no les gusta, a nadie tampoco les debe de gustar.
Si deseamos vivir en libertad nadie puede decirnos qué nos entretiene y qué no. Diferente es la repercusión de estos programas en la educación de quienes aún no pueden decidir, en aquellas personas que no comprenden eso que se llama libertad y que son los niños. Ante ellos hay una responsabilidad de los padres en proporcionarle lo que es bueno y valioso. No sería responsable de llenarlo de comida basura o dulces porque eso le ocasionaría daños físicos que en algunos casos son irreversibles (se sabe que si un niño tiene una mala dieta, cuando alcance la madurez recrudecerá algún mal adquirido de infante) Igual es con las formas de entretenimiento. Otorgarles saludables maneras de distraerse es responsabilidad de su entorno familiar, facilitándole acceso a la buena música, literatura, arte, a las manifestaciones audiovisuales de calidad. Sólo así el niño optará a criterio propio a no tener interés por programas que recurren al facilismo y la trivialidad.
Apagar el televisor debería ser el motivo de las marchas, a desconectarse por un tiempo de aquella influencia negativa, no hagamos caso de las intenciones elitistas de quienes nos quieren decir cómo entretenernos. Sino nos pareceríamos a esos bomberos de Fahrenheit 451, pero esta vez no entrarían a nuestras casas para quemar los libros sino para arrojar por la ventana nuestros televisores.

viernes, 8 de febrero de 2019

Las ideas y la amistad

Cuando a un poeta chileno ya fallecido (no recuerdo el nombre) le preguntaron qué lamentaba de estos tiempos, él respondió que ya no se puede ser amigo de quien piensa diferente. Recordaba que en muchas amistades la idea contraria era solo un detalle de su personalidad que se podía pasar de largo si es que estas poseían más virtudes. MVLL también hizo una observación al respecto, aunque desde otro ángulo cuando contestó sobre qué fue lo que quebró esa aparente unidad literaria que se forjó en el Boom. Puntualmente destacó el incidente con el caso Padilla (escritor arrestado por el régimen cubano de Castro), donde varios escritores no denunciaron claramente el hecho. Agregando que según el mundo literario de ese entonces (y también el de hoy) ser de izquierda daba una serie de beneficios a los escritores que les eran difíciles de renunciar y criticar a Castro era prácticamente un desafío directo a dicha postura ideológica. Así que pensar distinto daba una completa separación amical.
Sin embargo, en lo que diferían eran en las ideas y en la forma de plantearlas, y ahí me detengo para la siguiente reflexión. Para plantear una postura es precisa la explicación para enterarnos con claridad lo que guía la actividad de pensar, como decía Heidegger: los principios del pensamiento. No obstante, lo que se ve actualmente en las redes sociales es un sinsentido descomunal, planteamientos salidos más desde la bilis y no de las neuronas. Argumentos que chocan entre sí, claustrofóbicos, encerrados en conceptos equivocados o maniqueístas.
No son transparentes, no podemos hallar esos principios del pensamiento, y menos aún, los principios morales. Una idea mal planteada no sólo muestra la incapacidad argumentativa del que la expone, sino la carencia de raíces principistas y de valores. La ruptura de una amistad que está forjada en base a ideas y argumentos, debe ser ocasionada por un choque de la misma magnitud. Si esta se desvanece por un simple desencuentro coyuntural, es que ha habido un error de apreciación de la otra persona, pues se le ha considerado más responsable en sus ideas de lo que realmente eran.
La construcción de nuevas interpretaciones de la realidad no se consigue en un ring de box de las ideas, sino en una sala de debates donde todos busquen alguna conciliación. En conclusión, recomendaría que se expongan las ideas no con un punto final, sino con un eslabón abierto. La cadena del pensamiento nunca lleva candado.

Es necesario, en cualquier circunstancia, que los conflictos no lleguen a niveles dramáticos...

Es necesario, en cualquier circunstancia, que los conflictos no lleguen a niveles dramáticos. Hace unas semanas, vi un documental sobre la i...